Tarta de queso con leche condensada y limón ¡sin horno!
Esta tarta de queso con leche condensada y limón es una delicia cremosa y tangy. ¡No necesitas horno para prepararla, lo que la hace perfecta para los días de verano o cuando no tengas tiempo para encender el horno! Una receta sencilla y rápida que te dejará con un postre delicioso y perfecto para sorprender a tus invitados.
¿Por qué te encantará esta receta?
- Una combinación irresistible - ¡La mezcla del dulce de la leche condensada y el ácido del limón crea un sabor único y delicioso!
- Rápida y fácil de preparar - ¡Puedes tener esta tarta lista en menos de 30 minutos!
- Ideal para el verano - ¡Disfruta de un postre fresquito y ligero sin necesidad de encender el horno!
Ingredientes necesarios
- Queso crema – Utiliza queso crema de buena calidad para obtener una textura cremosa y suave. Yo prefiero usar la marca Philadelphia, ¡pero puedes elegir tu favorita!
- Leche condensada – Este ingrediente es clave para endulzar nuestra tarta sin necesidad de añadir azúcar. Además, le aporta una textura densa y deliciosa.
- Limones – Necesitarás zumo y ralladura de limón para darle ese toque ácido y refrescante a nuestra tarta. ¡No te olvides de exprimirlos bien!
- Galletas – Puedes usar galletas María o similares para preparar la base de nuestra tarta. Si quieres darle un toque diferente, ¡prueba con galletas de chocolate o digestive!
- Mantequilla – La mantequilla derretida ayuda a unir las galletas trituradas y crear una base crujiente y deliciosa. Yo suelo usar mantequilla sin sal, pero si prefieres un sabor más intenso, ¡no dudes en usar mantequilla con sal!
Preparación de la base de galleta
¡La base de galleta es un componente fundamental de nuestra tarta de queso con leche condensada y limón sin horno! Sin ella, la textura y el sabor no serían los mismos.
Para prepararla, tritura las galletas hasta conseguir un polvo grueso y mézclalo con la mantequilla derretida. Yo suelo usar mantequilla sin sal, pero si prefieres un sabor más intenso, ¡no dudes en usar mantequilla con sal!
A continuación, presiona la mezcla en el molde y refrigérala durante al menos 30 minutos. De esta forma, conseguirás una base firme y crujiente.
¿Sabías que también puedes experimentar con diferentes tipos de galletas? Prueba con galletas de chocolate, galletas digestive o incluso galletas de avena para darle un toque original a tu tarta.
Elaboración del relleno de queso y limón
¡Vamos a preparar el delicioso relleno de queso y limón para nuestra tarta sin horno! Empezamos batiendo el queso crema hasta que quede cremoso y suave. Yo suelo usar un batidor eléctrico para asegurarme de que queda perfecto.
A continuación, añadimos la leche condensada, el zumo y la ralladura de limón. Me encanta el toque cítrico que le da el limón a esta tarta, ¡es una combinación perfecta con el queso crema!
Una vez que tenemos todos los ingredientes mezclados, vertemos el relleno sobre la base de galleta y lo alisamos con cuidado. Si quieres darle un toque extra, puedes espolvorear un poco de ralladura de limón por encima antes de refrigerar la tarta.
Refrigeración y decoración
¡Ahora llega el momento de dejar que nuestra deliciosa tarta de queso con leche condensada y limón sin horno se asiente y adquiera la textura perfecta!
Una vez que hayas vertido el relleno sobre la base de galleta y alisado la superficie con una espátula, cubre el molde con film transparente. A continuación, refrigera la tarta durante al menos 4 horas o, si tienes paciencia, toda la noche.
Yo siempre la dejo reposar toda la noche, así me aseguro de que esté perfectamente cuajada y lista para disfrutar al día siguiente.
Cuando llegue el momento de decorar tu tarta, ¡deja volar tu creatividad! Puedes usar frutas frescas, como rodajas de limón o fresas, para darle un toque de color y sabor.
También puedes derretir caramelo y dejarlo caer en hilos sobre la superficie de la tarta, creando un bonito contraste. Otra opción es montar nata y extenderla sobre la tarta con una manga pastelera, ¡como hago yo! De esta forma, además de lucir espectacular, quedará aún más deliciosa.
Receta
Tarta de queso con leche condensada y limón sin horno
Tiempo de preparación: 20 minutos + 4 horas de refrigeración
Una tarta de queso sin horno, refrescante y deliciosa, perfecta para los días de calor o cuando no quieres encender el horno.
Ingredientes
- 200 g de galletas (tipo María o similares)
- 100 g de mantequilla sin sal
- 500 g de queso crema
- 400 g de leche condensada
- El zumo y la ralladura de 2 limones
Instrucciones paso a paso
- Comienza triturando las galletas hasta obtener un polvo fino. Derrite la mantequilla y mézclala con las galletas trituradas.
- Presiona la mezcla de galletas y mantequilla en el fondo de un molde desmontable de 22 cm de diámetro y refrigera durante 30 minutos para que se compacte.
- En un bol, bate el queso crema hasta que quede cremoso. Añade la leche condensada, el zumo y la ralladura de limón, y mezcla bien hasta obtener una textura suave.
- Vierte el relleno de queso y limón sobre la base de galletas y alisa la superficie con una espátula.
- Refrigera la tarta durante al menos 4 horas o hasta que esté completamente cuajada.
Notas:
- Puedes decorar la tarta con rodajas de limón, frutas frescas, nata montada o caramelo líquido antes de servir.
- Si prefieres una base de galleta más crujiente, puedes añadir 2 cucharadas de azúcar a la mezcla de galletas y mantequilla.
- Guarda la tarta en el frigorífico hasta el momento de servir y consúmela en un plazo de 3 días.